El número de pozos del primer semestre iguala a los del 2015, luego de dos años de caídas. Sin embargo, los proyectos en la formación estrella de Neuquén generaron un mayor movimientos de equipos de perforación.

Los datos más recientes del Ministerio de Energía de la Nación arrojan que en el primer semestre de este año fueron perforados 122 pozos petroleros en Chubut, una cifra que se asemeja a la del mismo periodo de 2015. La Cuenca Neuquina, con su principal estrella Vaca Muerta, sigue concentrando el mayor número de perforaciones y, por ende, de inversiones.

En los primeros seis meses de 2018 se pusieron en perforación en los yacimientos de Chubut 122 pozos productivos, cifra que fue ampliamente superior a los 95 de 2017, los 63 de 2016 y casi igualan a los 128 pozos que se encontraban en perforación en 2015 -momento que arrancó la crisis de la baja del precio internacional del crudo-, enumera un informe de El Extremo Sur.

La publicación también compara los resultados chubutenses con los del norte de Santa Cruz: durante este año se inició la perforación de solamente 12 pozos productivos. A pesar de haber aumentado un 50% respecto de los seis pozos del 2017, los datos oficiales muestran diferencias abismales si se los compara con los 66 pozos en perforación en 2016 y aún más si se los coteja con los 101 pozos de 2015.

Los datos semestrales confirman la tendencia iniciada hace por lo menos cinco años en la Cuenca Neuquina, donde resulta evidente la prioridad que se colocó en los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta. En el primer semestre de este año en Neuquén se pusieron en perforación 229 pozos productivos -casi el doble que en Chubut-, cifra que superó a los 218 de 2017 y a los 211 pozos de 2016, aunque fue inferior a los 284 pozos productivos en perforación de 2015.

A lo largo del primer semestre del año se terminaron 442 pozos para la producción en todas las cuencas nacionales, superando los 366 de 2017 pero quedando por debajo de los 578 de 2015.

En la Cuenca Neuquina se terminaron semestralmente 255 pozos productivos, una cantidad mayor a los 232 de 2017 pero inferior a los 273 de 2016; mientras que en la Cuenca del Golfo San Jorge se terminaron 158 pozos productivos, cantidad que superó a los 111 del año pasado pero que quedó muy alejada de los 184 de 2016 y más aún de los 301 pozos de 2015.

En tanto, los pozos exploratorios terminados en todo el país en el primer semestre de este año fueron 21 en total, frente a los 38 que se realizaron en 2017, los 33 de 2016 y los 28 de 2015. La baja de la exploración es un dato preocupante porque impide reponer con nuevas reservas los niveles de producción y porque además lo poco que se perfora se direcciona a Vaca Muerta.

En la Cuenca del Golfo San Jorge se terminaron este año sólo dos pozos exploratorios, frente a los cinco de 2017, cuatro de 2016 y cinco de 2015. Mientras, en la Cuenca Neuquina los pozos de exploración totalizaron en el primer semestre pasado 16, en 2017 habían sido 31, en 2016 fueron 28 y en 2015 se habían concretado 22 pozos exploratorios.